cie/ Rose Marie Brillant ensalza el modelo de formación español como una referencia mundial

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González Jurado y Sendín coinciden en la necesidad de revisar los roles profesionales
| 2010-02-19T16:19:00+01:00 h |

m. raspal

Madrid

El modelo español de formación enfermera de práctica avanzada, el desarrollo de siete nuevas especialidades, la conversión a grado de los estudios universitarios y la reciente aprobación de la prescripción enfermera de medicamentos es, para la presidenta del Consejo Internacional de Enfermería (CIE), Rose Marie Brillant, una referencia a seguir por los sistemas sanitarios de todo el mundo, que ya están trabajando para implantar uno similar.

Durante una visita organizada por el Consejo Enfermero español y el Colegio de Barcelona —ciudad que acogerá en 2017 el Congreso Mundial que el CIE celebra cada cuatro años—, la australiana Brillant explicó que en su país, uno de los primeros en regular la prescripción de la enfermería hace diez años, la medida ha sido muy beneficiosa para todos los profesionales, tanto que los propios médicos han perdido el miedo inicial y han abogado por que se aumenten los fármacos a recetar por los enfermeros.

Vigilante de la prescripción

Además, señaló que varios estudios científicos realizados en Australia, Reino Unido, Irlanda y EEUU han demostrado que esta nueva función mejora los resultados conseguidos por los galenos, por lo que estos países han creado la figura del prescription watcher, un enfermero que enseña a prescribir a los médicos con calidad y menos impacto económico. “Hablamos de recetar fármacos en patologías donde la enfermera gestiona asiduamente el diagnóstico y los cuidados”, matizó.

Redefinir funciones

En España, sin embargo, el actual modelo asistencial está basado exclusivamente en el médico, cuando para lograr una planificación homogénea y acorde con las necesidades del ciudadano habría que aprovechar el potencial enfermero, reconociendo sus nuevas competencias y garantizando el volumen necesario de estos profesionales, cuestiones que deberían quedar recogidas en un Libro Blanco de la Profesión Enfermera.

Así lo expuso el presidente del Consejo General de Enfermería (CGE), Máximo González Jurado, durante su comparecencia en la subcomisión del Congreso del Pacto por la Sanidad, resaltando que España necesita al menos 150.000 enfermeros más para igualarse a la media europea —531 por cada cien mil habitantes frente a 808 de la UE— y 242.583 para alcanzar la proporción adecuada. Para González Jurado también es necesario unificar las pautas de actuación con guías de buenas prácticas enfermeras, identificando sus cuidados y unificando criterios de actuación en todo el proceso enfermero: valoración, diagnóstico, planificación, ejecución y evaluación.

También el presidente del Consejo de Médicos, Juan José Rodríguez Sendín, apostó durante su intervención en esta subcomisión por revisar las competencias de todos los profesionales, también de los auxiliares, considerando que las cargas burocráticas del médico y los cuidados asistenciales básicos de los enfermeros los pueden asumir otros colectivos.