l La juez considera que el Colegio de Madrid vulnera el derecho a la libertad sindical

l La Junta Directiva echa un pulso a la Justicia y vuelve a despedir a Martínez

| 2009-09-13T18:02:00+02:00 h |

José García

Madrid

A Juliana Fariña se le acumulan en las últimas semanas las sentencias contrarias al Colegio de Médicos de Madrid, del que es presidenta, por despidos improcedentes de varios trabajadores. Hasta el momento, todas las sentencias han dado la razón a los trabajadores, poniendo en entredicho los despidos acordados por la Junta Directiva de la anatomopatóloga y la defensa de los mismos realizada por la asesoría jurídica.

En enero de 2009, la Junta Directiva decidió despedir tanto al técnico Óscar Sanz Llorente como a la administrativa Marta García Cruz, que disfrutaba de una jornada reducida para cuidar a un menor, alegando, entre otras razones, una “disminución continuada y voluntaria en el rendimiento del trabajo”. La Junta asumía que el despido era improcedente y se ofrecía a pagar de las arcas colegiales las indemnizaciones oportunas. En el caso de Sanz, 18.883,52 euros, y en el de García, 19.345,70 euros. Curiosamente, los dos trabajadores despedidos formaban parte de la sección sindical de UGT en el colegio.

Ahora la justicia ha puesto negro sobre blanco, y el juzgado de lo Social nº 19 ha condenado al Colegio de Madrid a la readmisión inmediata de Óscar Sanz en las mismas condiciones que regían con anterioridad al despido así como al abono de los salarios de tramitación, más los que se devenguen desde la fecha de la sentencia hasta la readmisión del trabajador a razón de un salario diario de 108,09 euros. La juez entiende que queda probada la vulneración del derecho a la libertad sindical del trabajador y que el despido tiene como móvil una represalia por la actividad sindical desarrollada así como para impedir la continuidad de la misma.

Con la sentencia sobre la mesa, la oferta que el colegio le ha hecho a Sanz es pagarle el salario a cambio de que se quede en su casa, según las fuentes consultadas por GM.

En el caso de Marta García, el juzgado de lo Social nº 6 también declara nulo su despido al encontrarse disfrutando de una jornada reducida. Además, añade la sentencia que el colegio ni siquiera ha presentado alegaciones sobre la verdadera causa del despido y que encima reconoce la improcedencia del mismo. El juez condena a la corporación a la readmisión inmediata de la trabajadora y a abonar los salarios de tramitación dejados de percibir desde el 23 de enero, día de su despido, hasta la readmisión a razón de 40,89 euros diarios.

Un caso similar es el del auxiliar Carlos Vega. El juzgado de lo Social nº 8 también ha declarado improcedente su despido y condena al colegio a readmitirlo o a indemnizarlo con 10.840, 05 euros.

De nuevo, despedida

Más sorprendente es aún el caso de Concepción Martínez. Una sentencia del juzgado de lo Social nº 10 declaró nulo el despido de la jefa del área administrativa en el Departamento de Personal y condenó al colegio de Fariña a readmitirla y pagarle 12.000 euros por daños morales (ver GM nº 296). Ahora bien, el equipo de Fariña ha decidido echar un pulso a la Justicia, y sin ejecutar esta sentencia, ha vuelto a despedir a Martínez, hecho que de nuevo está recurrido en los juzgados. Habrá que esperar ahora a que los tribunales de nuevo se pronuncien.

GM se ha puesto en contacto con la jefa de prensa del colegio, Ana García Rivas, para que la entidad pudiera aclarar estos despidos, sin recibir respuesta alguna.