Sin muertes y un número significativamente menor de pacientes ingresados en la unidad de cuidados intensivos. Esos fueron los dos resultados más significativos de intervenir con complementos de vitam- ina D a un grupo de pacientes infectados y hospitalizados con COVID-19.

El estudio, que se publica antes de la impresión en la edición de octubre de The Journal of Steroid Biochemistry and Molecular Biology, se suma a la creciente cantidad de evidencia científica de que la vitamina D ayuda eficazmente al cuerpo a combatir la infección por COVID-19, supuestamente a través de mecanismos que controlan la reacción inmune y previenen la llamada tormenta de citocinas que se sabe que causa daño al tejido pulmonar.

Vitamina D como terapia complementaria

El estudio, que fue realizado por investigadores del Hospital Universitario Reina Sofía de Córdoba, España, incluyó a 76 pacientes, todos los cuales habían sido hospitalizados con COVID-19. Todos los pacientes recibieron la misma terapia estándar consistente en hidroxicloroquina y azitromicina. Además, cincuenta de los pacientes recibieron complementos de vitamina D como terapia adicional a su medicación estándar, mientras que los 26 pacientes restantes no recibieron vitamina D.

Sin muertes en el grupo que recibió vitamina D

Solo un paciente del grupo de vitamina D ingresó en la unidad de cuidados intensivos, mientras que 13 de los 26 pacientes no tratados con vitamina D ingresaron en la UCI. Ninguno de los pacientes del grupo de vitamina D falleció y todos fueron dados de alta sin complicaciones. De los 13 pacientes del grupo no tratado que ingresaron en la UCI, dos fallecieron y los 11 restantes fueron dados de alta.

Reduce la necesidad de cuidados intensivos Aunque el estudio tiene sus limitaciones, ya que es un estudio piloto y no un estudio doble ciego controlado por placebo, los científicos lo consideran una buena prueba de que la vitamina D es una forma de reducir significativamente la necesidad de tratamiento en la unidad de cuidados intensivos entre los pacientes infectados con COVID-19. Los científicos concluyen que la terapia con vitamina D parece ser capaz de reducir la gravedad de la enfermedad, pero se requieren ensayos más grandes