Trato y tratamiento óptimos para saltar de lo bueno a lo excelente

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“El trabajo hay que disfrutarlo y vivirlo con pasión. Es la mejor manera de obtener los mejores resultados y la única de conseguir ser felices”. Son las palabras de Carmen González Enguita, jefa del Servicio de Urología del Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz.

Son ya cinco los años en los que este servicio ha conseguido ser el mejor en su categoría. Cuando no ha sido así, se han situado entre los finalistas desde que se presentaron por primera vez en la quinta edición.

“Es un compromiso y una responsabilidad con los pacientes a quienes atendemos, con el propio equipo de Urología, con la institución que nos representa y nos facilita estos logros (HUFJD) y con la sociedad a la que nos debemos con resultados y con nuestro mejor hacer”, remarca.

González-Enguita explica lo que supone para ellos la calidad asistencial. “La calidad en la asistencia, en la atención, en el diagnóstico, en el tratamiento, en la relación médico-paciente cualquiera que sea su dimensión… en ‘el trato y el tratamiento’, como lo entendemos en nuestros hospitales, es el valor diferencial que convierte a una buena medicina, una buena urología, en una urología excelente”.

El servicio se halla inmerso en un proceso de mejora continua. “Como profesionales que trabajan la eficiencia, estamos en proceso continuo de formación con el fin de poder aportar al paciente los mejores conocimientos científicos y técnicos en la mejor evidencia científica”, resume.

La responsable asegura que una vez que han escuchado y entendido lo que el paciente necesita que conozcan de él para atenderle mejor, se están continuamente incorporando acciones que vienen de la mano de haber entendido que la urología más eficiente debe estar centrada en el paciente. Y así, siguiendo una de las líneas estratégicas de la organización, trabajan diferentes herramientas para mejorar la experiencia del paciente.

Una de ellas es la nueva comunicación que surge de la transformación digital. “Nos relacionamos con el paciente de la manera más adecuada para cada uno, tanto de manera presencial como no presencial, según sus características y necesidades. Nuestra institución nos facilita muchas herramientas de comunicación, sobre todo a través del Portal del Paciente, una aplicación y espacio propio en la web (www.fjd.es) donde poder estar representado, viendo y participando con su historia clínica”, expone.

La urología es una especialidad tan diversa y variada como diferente en sus áreas de conocimiento y de actuación, añade. En cada campo intentan ofrecer la mejor formación y crecimiento, las mejores habilidades y conocimientos, su mejor hacer para la curación. “En los cuidados deseamos que se reflejen los mejores avances, farmacológicos y técnicos, tanto en el diagnóstico como en el tratamiento”, puntualiza la especialista.

El servicio está integrado por un equipo que ella misma califica como numeroso: 24 urólogos, de los cuales cinco son médicos residentes, un equipo amplio de Enfermería en todo su entorno: quirófano, hospitalización, consulta y UDT-Urología (Unidad de Diagnóstico y Tratamiento Urológico), junto con diversos tipos de profesionales no sanitarios. “Entre todos hacen del equipo una gran fortaleza”, sentencia. Además, asegura que todos ellos están implicados en la atención del paciente y su entorno, donde la familia tiene un gran protagonismo. “Sabemos y sentimos que estamos realmente inmersos en una medicina centrada en el paciente (MCP), en una urología centrada en el paciente”.

Como sellos de identidad, González Enguita destaca en que son urólogos y/o profesionales de la salud urológica que trabajan por, para y con el paciente que padece o está preocupado por un asunto urológico en uno de los mejores hospitales de España, el Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz, del Grupo QuirónSalud en Madrid. También que viven la urología con pasión, y “eso se ve y se nota a flor de piel y por todos los costados”.

De cara al futuro, el servicio tiene en marcha varios proyectos. El primero de ellos una iniciativa para medir resultados en salud, que mejoraran el valor en esta búsqueda de la calidad de la asistencia. “Lo que más interesa de los tratamientos, después de aplicar el mejor y más oportuno, es la mejora funcional de las personas atendidas con el fin de que sean capaces de vivir vidas normales y productivas”, destaca. La urología del grupo participa con dos procesos asistenciales concretos: el carcinoma de próstata localizado, y la vejiga hiperactiva. “Creemos que los procesos donde estamos inmersos adquieren valor si los trabajamos desde el enfoque de quien los utiliza y se beneficia de ellos el paciente”, acota.

El segundo proyecto, enlazado con el anterior, es un proyecto de humanización de la urología, denominado 4H-HURO. “Creemos que la ciencia, la tecnología, el conocimiento y la evidencia científica deben de caminar soportándose juntos, y que el ser humano, la humanidad, debe de estar en centro de todos los desarrollos, remarca. En este sentido están desarrollando un Plan de Humanización en la Urología siguiendo los objetivos y directrices del Plan de Humanización de la Consejeria de Sanidad de la Comunidad de Madrid.

“Tenemos muchas, muchas acciones por desarrollar. Poder sentir, comprender, escuchar, tocar, abrazar, mirar a los ojos, llorar, expresar afecto, amor… es mucho más de lo que solemos dar, puede ser mucho más de lo que el paciente espera. Estamos convencidos y empeñados en poderlo dar”, remarca la responsable del servicio.

La tercera línea pasa por promover acciones divulgativas de la especialidad en formato videoblog. Con ello, pretenden dar a conocer la urología en toda su dimensión y magnitud. “Creemos que trabajando este aspecto podemos ayudar a mejorar la promoción y prevención de la salud, otro de los pilares estratégicos de nuestra institución”, finaliza.