Almudena Fernández Madrid | viernes, 25 de noviembre de 2016 h |

La evolución exponencial de los tratamientos oncológicos en los últimos años, así como los múltiples retos pendientes en este campo dieron lugar a la elaboración del ‘Plan estratégico de Atención Farmacéutico al Paciente Oncohematológico’, elaborado por el Grupo de Farmacia Oncológica (Gedefo) de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH) y que cuenta con el apoyo de Novartis.

El presidente de esta sociedad científica, Miguel Ángel Calleja, explicó que el objetivo fundamental de este plan es mejorar los resultados en salud y, para ello, es esencial que todos los profesionales que trabajan en oncología colaboren.

Calleja aseguró que la farmacia hospitalaria es un aliado del paciente en lo que respecta a las innovaciones terapéuticas de calidad, por lo que lucha “para que lleguen cuanto antes”, así como en lo relativo a la organización, trabajando en favor de mejorar al calidad percibida, el confort, la atención cercana y el acompañamiento del paciente, pues es importante que sienta que su farmacéutico está “lo más cerca posible”. Asimismo, incidió en que se puede mejorar mucho todavía en su alianza con médicos y enfermeros para que los tratamientos sean efectivos y seguros.

Además, el farmacéutico es también aliado de las administraciones en el terreno de la eficiencia, por lo que pidió que “el dinero que se ahorra por ese lado, se reinvierta en el paciente y se trabaje en humanización”.

Y es que, tal y como agregó, aparecen fármacos nuevos que aportan más eficiencia, más seguridad y menos efectos adversos clásicos como los de la quimioterapia, sin embargo, “la seguridad nunca es total”, por lo que resulta fundamental que todo el equipo que atiende al paciente se vuelque en ello.

Menor dependencia

Que el paciente sea cada vez menos dependiente del hospital gracias a la administración de fármacos por vía oral y a los tratamientos domiciliarios es otro de los objetivos, siempre con el apoyo constante del farmacéutico para mejorar el cumplimiento terapéutico y utilizando las nuevas tecnologías también para ese fin.

La trazabilidad es otro de los aspectos en los que trabaja la profesión, por lo que es importante recorrer todo el circuito del medicamento y trabajar en colaboración con los oncólogos.

El presidente de la SEFH hizo hincapié también en que, a diferencia de hace unos años, ya no imagina un servicio de oncología que no tenga un farmacéutico asignado, aunque lamentó que esta figura exista solo en dos de cada tres centros, por lo que solicitó que se reordenen los servicios de farmacia y se trabaje con la administración para que sea algo prioritario.

El Plan

En concreto, este plan recoge la necesidad de incorporar cambios organizativos y tecnológicos en procesos que permitan mejorar la organización y la calidad en la atención oncohematológica, así como la seguridad y el cuidado integral en el proceso farmacoterapéutico de estos pacientes. Para ello, los hospitales deben disponer de un sistema de información integral de gestión del proceso farmacoterapéutico de estos pacientes, de uno de información de gestión del proceso farmacoterapéutico del paciente oncohematológico integrado en los sistemas de información del hospital y de otro de prescripción electrónica de fármacos oncohematológicos integrado en la historia clínica y con elementos de ayuda en la toma de decisiones.

Además, los servicios de farmacia tienen que contar con un sistema de información de validación con elementos de ayuda en atención farmacéutica e integrado en la historia clínica, con un sistema que incluya trazabilidad y seguridad en el proceso de preparación de medicamentos oncohematológicos y con una fórmula de información y de atención farmacéutica ambulatoria de la farmacoterapéutica del este tipo de paciente con elementos de ayuda en atención farmacéutica, trazabilidad y seguridad.


Aunque se haya avanzado, la seguridad “nunca es total”, por lo que es esencial que todo el equipo se vuelque en ello



La sociedad quiere que se incremente la participación del farmacéutico en proyectos de investigación


Es esencial que los centros tengan también un método integrado de información de gestión del proceso farmacoterapéutico que incluya evaluación de resultados de los tratamientos y uno de administración de fármacos oncohematológicos informatizados que incluyan elementos de ayuda dirigidos a la seguridad, entre otros.

Asimismo, la farmacia hospitalaria deberá participar activamente en la implantación de nuevas tecnologías orientadas a la correcta educación del paciente y que faciliten una mayor participación activa del paciente, así como su acceso a información sobre su propio proceso. Se incluyen aquí aplicaciones, dispositivos móviles, teleasistencia y plataformas que abran canales de comunicación con pacientes.

De cara a la formación y docencia, el servicio de farmacia deberá implementar un programa de desarrollo profesional individualizado para los farmacéuticos oncohematológicos, promover la acreditación del farmacéutico especialista en farmacia hospitalaria en el área de capacitación profesional específica en farmacoterapia oncohematológica e incluir dentro de la formación específica al farmacéutico especialista. También hay que generalizar la formación en técnicas de comunicación y de entrevista clínica a paciente, implementar un programa de desarrollo profesional individualizado para el personal técnico y de enfermería del servicio que atiende a estos pacientes y elaborar perfiles que definan la capacitación profesional y competencias que debe tener el personal técnico y de enfermería del servicio que atiende al paciente oncológico.

La SEFH quiere también incrementar la participación del farmacéutico de hospital en proyectos de investigación.

Por otro lado, Irene Mangues, coordinadora nacional de Gedefo, anunció que este grupo de trabajo va a realizar una encuesta de situación sobre la farmacia oncohematológica para comprobar si mejora paulatinamente.