ESTHER MARTÍN DEL CAMPO Madrid | viernes, 30 de septiembre de 2016 h |

En la antesala del 61 congreso de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH) los profesionales pueden participar en un curso precongreso que aborda el martes 4 de octubre los ‘Nuevos enfoques en adherencia terapéutica’. Olatz Ibarra pertenece a Adhefar, el grupo de la SEFH que organiza esta actividad.

A la hora de definir el papel que los farmacéuticos hospitalarios juegan en este terreno, la especialista considera que estos profesionales están “muy familiarizados con las ventajas y limitaciones de los métodos de medida de adherencia”. Aun así, subraya que la formación continuada y el compartir las experiencias en materia de adherencia, “es la clave para crecer como profesional”.

No obstante, en el día a día, existen importantes limitaciones en la práctica que impiden alcanzar por completo este objetivo. “La mayor limitación que tenemos es que no tenemos un método óptimo de estimación de la adherencia, y debemos conocer sus limitaciones”, apunta. Por ejemplo, aclara Ibarra, la adherencia medida por los datos de dispensación da un valor que ha de confirmarse a través de la “entrevista clínica con el paciente”; pero a su vez mide la adherencia en el tiempo y esto resulta tremendamente interesante en los tratamientos crónicos. Otra limitación que destaca es la falta de tiempo para llegar a todos los pacientes, de ahí la importancia de realizar una buena selección para alcanzar a quienes más lo necesitan.

La coordinadora destaca que la principal consecuencia de la falta de adherencia es de carácter clínico, “la no consecución de resultados en salud”. “Es obvio que los medicamentos no funcionan en los pacientes que no los toman”, incide. En segundo lugar, cita las complicaciones derivadas de su patología no tratada o mal tratada, así como el impacto económico que ello supone.

Para superar estas barreras, la especialista destaca que es “vital reforzar la comunicación con el paciente y trasmitirle la idea de la importancia de la adherencia y las consecuencias de no tomar bien la medicación. La relación con el paciente debe ser imprescindible para construir nuevas creencias en el paciente y educarle en los beneficios de los tratamientos”.

En cualquier caso, una idea común en el colectivo de los pacientes es que estos profesionales no siempre resultan accesibles en el momento en el que surge una duda. En opinión de Ibarra, los profesionales de la farmacia hospitalaria sí están cerca del paciente externo del hospital. “El paciente se acerca al hospital a recoger la medicación de dispensación hospitalaria y es en ese momento donde debemos interactuar con él, estableciendo una atención farmacéutica continuada con un adecuado seguimiento de su farmacoterapia y ajustado a las necesidades del paciente”, remarca.

Otro aspecto importante para estos profesionales es la heterogeneidad de la adherencia terapéutica. En este sentido, la especialista considera que “la tarea en materia de adherencia más que con áreas o especialidades médicas, está relacionada con otras barreras como son la complejidad de los tratamientos, dificultades de los pacientes en relación a creencias y/o beneficios percibidos, situación crítica del paciente, etc.”. Aunque hay patologías más exigentes con este aspecto, subraya que lo importante no es el área, “sino más bien tener un sistema de monitorización de la adherencia continuado que te permita detectar los pacientes con mayores dificultades”.

Otro dato esencial para la coordinadora es que este objetivo requiere siempre un abordaje multidisciplinar y cada profesional debe hacerlo desde su conocimiento. “El farmacéutico que realiza la atención farmacéutica en estrecha relación con el paciente conoce las barreras y factores que pueden limitar la adherencia; especialmente conoce todos los aspectos de la adherencia relacionados con el tratamiento y esta información es crítica para asegurar un buen nivel de ésta”, puntualiza. De este modo, destaca que “monitorizar, mantener y realizar intervenciones para mejorar la adherencia de forma sistemática es un aspecto imprescindible en la atención farmacéutica”.

Con este objetivo el grupo Adhefar lleva a cabo diferentes iniciativas, aunque su portavoz es consciente de que esta tarea se promueve en el día a día realizando una atención farmacéutica de calidad, en la que se aborde con el paciente la importancia de seguir bien el tratamiento y se discutan con él las barreras y soluciones para evitar incumplimientos.

Al margen de la actividad diaria, el grupo impulsa el Día de la Adherencia, con el objetivo de dar visibilidad a este problema a nivel nacional. En la misma dirección, este grupo plantea otras muchas actividades educativas y formativas para los farmacéuticos de hospital con el fin de mejorar su conocimiento sobre adherencia, estimación de la adherencia y barreras e intervenciones para mejorarla. Precisamente, el curso precongreso monográfico es una de ellas, junto al proyecto de editar un libro para que los profesionales implicados puedan profundizar en este tema.


“Es vital reforzar la comunicación con el paciente y transmitir la importancia de la adherencia”, afirma Ibarra



Hay que apostar por monitorizar, mantener y realizar intervenciones para que cumplan los tratamientos