Almudena Fernández Madrid | viernes, 27 de enero de 2017 h |

De los 68 centros penitenciarios que hay en España, menos de la mitad disponen de farmacéutico a pesar de que la legislación vigente obliga a que todos estos centros tengan un servicio de farmacia (SF) o depósito de medicamentos (DM) legalmente autorizado y con un facultativo especialista al frente en el caso de los segundos. Sin embargo, actualmente alrededor de 40 centros penitenciarios no tienen legalizado ninguno de los dos. Y es que, además de que el número total de farmacéuticos en las cárceles es de alrededor de 30, de ellos son especialistas solo diez.

Gloria Hervás, miembro del Grupo de Relaciones Laborales de la Sociedad Española de Sanidad Penitenciaria (SESP) y miembro de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH), aseguró a GM que “se están comprando medicamentos en DM sin farmacéutico” y, por ello, la SEFH ya se puso en contacto con la patronal nacional de la industria farmacéutica innovadora (Farmaindustria) ya que, uno de los temas a tratar es que “los laboratorios farmacéuticos no deben vender a esos depósitos de medicamentos que no están legalizados”. Por este motivo, esta sociedad científica asegura que, en caso de que no sea escuchada su petición, pasarán a tomar “medidas más serias y denunciarán directamente al laboratorio que incumple o al mayorista” que esté vendiendo esos fármacos.

De hecho, la SEFH, la SESP y la Organización Médica Colegial se reunieron recientemente para abordar los problemas de la sanidad penitenciara de manera conjunta. Su objetivo fundamental es que se realice la transferencia de la sanidad penitenciaria a las comunidades autónomas siguiendo el modelo de País Vasco (única comunidad en la que se ha realizado) y, aunque no hay un farmacéutico especialista en cada cárcel, éstas pasan a depender del SF del hospital de referencia, que acude regularmente a las prisiones. Desde la SEFH ya se están poniendo en contacto con algunos grupos parlamentarios para trasladarles esta petición.