El grupo parlamentario VOX ha presentado una Proposición no de Ley para poner sobre la mesa de la Comisión de Sanidad en el Congreso una serie de medidas que reduzcan el impacto psicológico de la pandemia sobre los profesionales sanitarios y sociosanitario.
La iniciativa insta al Gobierno a “promover el desarrollo de las medidas necesarias para reducir el impacto psicológico de la pandemia sobre los profesionales sanitarios y sociosanitarios, estableciendo una correcta formación sobre la COVID-19, reforzando las medidas de seguridad y garantizando las necesidades básicas del personal”.
Para ello, continúan, “mientras nuestro país siga expuesto a la crisis sanitaria, se recomienda proveer a los sanitarios de áreas de descanso o de alojamientos adecuados, y facilitar que reciban visitas periódicas de profesionales de la salud mental o asistencia psicológica telefónica a nivel nacional”.
Mientras dure la situación
El texto de VOX también aboga por mantener el funcionamiento de las medidas anteriores durante un tiempo suficiente, “en atención a la prolongación de la sobrecarga de trabajo de los sanitarios, y para evitar y tratar posibles casos de estrés postraumático causados por esta pandemia”.
Asimismo, proponen implantar medidas preventivas dirigidas a mejorar la resiliencia de los sanitarios, “resultando prioritario en ese sentido que los profesionales dispongan de atención psicológica de manera rápida en caso de que aparezcan los primeros síntomas de problemas de salud mental”.
Un Plan Nacional de Salud Mental COVID-19
Ante esta situación, los diputados de VOX también plantean “la implantación a nivel nacional de un Plan de Salud Mental COVID-19 para profesionales sanitarios y sociosanitarios, con programas de soporte emocional que contengan, al menos, un servicio de atención temprana, y que promuevan mecanismos de protección”. De manera indirecta, matizan que dicho Plan podrá también aplicarse a la intervención con pacientes o familiares.
En la misma línea, la PNL insta al Gobierno a promover el incremento del personal de atención de programas de soporte a estos sanitarios para atender toda la demanda que llega desde Atención Primaria y evitar el incremento de la demora asistencial y el aumento de la atención urgente.
Para finalizar, proponen al Gobierno que adopte las herramientas para realizar un seguimiento físico y psíquico a los sanitarios que se han visto afectados en su salud mental a causa de la crisis sanitaria de la COVID-19.