El Ministerio de Sanidad mantiene su silencio sobre la última petición de diálogo de los sindicatos de médicos y profesionales de enfermería. Ambas entidades, CESM y Satse, han mostrado su profundo malestar por la falta de respuesta y tras su último encuentro han señalado que están trabajando ya en posibles iniciativas “por la inacción del Gobierno ante la grave situación que atraviesan los médicos y enfermeras y enfermeros de nuestro país”, como citan en un comunicado conjunto.

Tanto el secretario general de CESM, Gabriel del Pozo, como el presidente de Satse, Manuel Cascos, lamentan que el responsable del Ministerio de Sanidad “siga sin mostrar ningún interés por abordar con sus organizaciones la difícil situación a la que se está enfrentando nuestro Sistema Nacional de Salud (SNS) por la grave expansión de la Covid-19, de cara a buscar de manera conjunta soluciones a todos los problemas existentes”.

Sin respuesta desde principios de mes

Tal y como avanzó este periódico la semana pasada, el último ofrecimiento de diálogo al titular de Sanidad se produjo a principios de octubre. Quince días después, y ante la falta de respuesta, ambas entidades han asegurado que trabajan posibles iniciativas en un futuro próximo sin descartar ninguna opción. Las decisiones al respecto se adoptarán en próximas fechas.

Por ahora, el sindicato médico ya ha anunciado su convocatoria de huelga nacional el próximo 27 de octubre, que ya está registrada en los ministerios correspondientes, según ha confirmado CESM esta misma mañana.

Los sindicatos profesionales subrayan que es “absolutamente inconcebible” que desde el Ministerio de Sanidad “se mire hacia otro lado cuando los representantes de enfermeras, enfermeros y médicos les piden colaborar para mejorar nuestro Sistema Nacional de Salud en plena pandemia de la Covid-19, teniendo en cuenta, además, que existe una clara previsión de endurecimiento de la crisis sanitaria en las próximas semanas”.

Partidarios del diálogo

Recuerdan también que desde hace años se han mostrado partidarios a trabajar de manera conjunta con los sucesivos responsables del Ministerio de Sanidad “para resolver problemas muy importantes que afectan al personal sanitario, como la alta precariedad y temporalidad, sobrecarga de trabajo, agresiones físicas y verbales, etc.”.

Sus portavoces insisten en que resulta fundamental propiciar diálogo y acuerdos en un momento en el que el sistema sanitario está cada vez más tensionado. Remarcan, además, que el esfuerzo que están llevando a cabo los profesionales sanitarios debe ir acompañado de una política de apoyo de las autoridades que refuerce el objetivo común de ofrecer la mejor atención sanitaria posible a los ciudadanos.