La situación derivada por el coronavirus se ha convertido en una emergencia sanitaria que atañe a todos los países del mundo. Después de que el pasado 11 de marzo la OMS declarara al Covid-19 como pandemia, las medidas han ido sucediéndose en España hasta alcanzar en estado de alarma. Sobre todas estas cuestiones ha hablado Serafín Romero, presidente del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (Cgcom), en una entrevista exclusiva con Gaceta Médica.

Pregunta. La crisis del coronavirus es una situación sin precedentes en nuestro país que está poniendo al límite a nuestro Sistema Nacional de Salud, ¿cómo lo está viviendo?

Respuesta. Desde el punto de vista del Cgcom estamos viviendo la situación con altísima preocupación. Estamos ante una situación no conocida, que nos está sorprendiendo especialmente en la intensidad en la cual estamos inmersos. Ahora mismo estamos viviendo con preocupación e intensidad la carga a la que se está sometiendo nuestro sistema sanitario, especialmente en algunos puntos concretos. Esto hizo que desde un primer momento el Cgcom hablara de la necesidad de suspender congresos, jornadas, etc. En ese momento se nos tachó de excesivamente alarmistas.

Hemos ido marcando algunas pautas en relación a las principales prioridades en estas dos últimas semanas. Especialmente en lo que refiere a la protección de los sanitarios y la necesidad de tener la mayor protección para ellos. Nos tiene todavía muy preocupados la escasez de material de seguridad y por eso hemos aplaudido en general la medida de la alarma, ya que va encaminada a hacer acopio del máximo material y su producción.

Hemos comentado la necesidad de que se aumentara ese aislamiento social, que también hemos acogido gratamente cuando el presidente del Gobierno planteó ese escenario y las medidas que se están poniendo. En resumidas cuentas estamos muy alerta, muy pendientes del evolutivo y contribuyendo, en la medida de lo posible, a canalizar los recursos humanos, especialmente en el entorno de la medicina.

P. En término generales, ¿cómo valora las medidas que afectan a los recursos humanos tomadas por el Ministerio de Sanidad?

R. Las medidas, quitando algún matiz que habrá que hacer de las mismas, conllevan ahora mismo poner todos los recursos sanitarios en pro de la lucha contra el coronavirus. No hay entornos privados ni entornos públicos, todos son entornos sanitarios y esto nos parece muy adecuado. En segundo lugar, se han planteado escenarios de reposición o de apoyo al personal sanitario. Nosotros también hemos priorizado la necesidad de incorporar a aquellos compañeros que se encuentran con actividad asistencial ahora mismo sin ejecución. Este es mi propio caso, de cara a ponernos a disposición de nuestras gerencias para retomar nuestra vuelta al trabajo sin menoscabo de los que ya están trabajando ahora mismo de forma temporal en nuestros puestos. Estamos pendientes muchos que así sea cuando los determine la gerencia.

Hablábamos de la importancia que podría tener ese gran arsenal de médicos recién graduados, algunos ya a punto de coger ya su plaza de formación MIR y aquellos que no lo han podido superar este año. Estos podrían echar una mano importante en el abordaje y triaje y en las primeras medidas de contención de esta pandemia. También hemos hecho hincapié en algunos compañeros jubilados, especialmente en los que llevan menos tiempo, y especialmente en algunos servicios concretos que sí van a necesitar que se produzca este plus de descanso o de apoyo a aquellos compañeros que ahora mismo están haciendo en algunos sitios un trabajo agotador, con un compromiso encomiable.

Fuente: OMC. Serafín Romero en una foto de archivo.

“Nosotros también hemos priorizado la necesidad de incorporar a aquellos compañeros que se encuentran con actividad asistencial ahora mismo sin ejecución”

Hay que hablar de algunas medidas que ha puesto el Ministerio, como el tema de prorrogar esta actividad en los que están a punto de acabar su residencia. Yo espero que la palabra prorrogar se convierta en la posibilidad de hacerles un contrato ya como personal, aunque sea con carácter temporal, para que sigan adscritos a sus servicios y no sea prorrogar una situación de residencia. De momento tienen un contrato hasta mayo y esperemos que si lo tienen que hacer, se haga en las condiciones más idóneas.

Yo creo que estas medidas, en las que incluso se ha planteado un escenario con estudiantes aunque esperemos no tener que llegar a este punto, son adecuadas. Habrá que hacerlas de manera coordinada, que sean para todo el país. Lo que sí se va a encontrar es a una profesión totalmente comprometida en busca de soluciones.

P. Con la declaración del estado de alarma en España, ¿cree que soluciona y pone remedio a los problemas de coordinación existentes?

R. Yo creo que el Ministerio lo ha hecho bien, de manera coordinada con las autonomías. Ha sido posiblemente en esta última semana donde todo el mundo ha planteado que era necesario ir tomando medidas. Con ello, hemos podido observar cierta descoordinación en entornos de diferentes comunidades dependiendo de la evolución.

Es muy importante pedir que las medidas sean muy consensuadas. Es cierto que ahora mismo el mando único esta en el gobierno de España, pero también que en esta alarma se sigue dando un papel importante al entorno de la gestión de los servicios asistenciales a las CC.AA.

Lo único que pedimos es que haya coherencia para todo el Estado. Ha llegado la hora de que rememos todos juntos, es muy importante que haya un mando único y que esta gestión directa desde la máxima lealtad, esté también encomendada a quien gestiona los servicios más cercanos.

P. Las nuevas medidas tomadas por Sanidad aluden, entre otros, a los médicos MIR, ¿cómo cree que les puede afectar?

R. Yo creo que es una buena medida que estos compañeros que ahora mismo están a las puertas de obtener su especialidad. Si tenemos necesidad de ello, no olvidemos que ahora mismo están trabajando a destajo dentro de todos los servicios. De hecho, ya están siendo una pieza importantísima para poder soportar la sobrecarga por la crisis del coronavirus. Ahora mismo lo que habría que plantear, en el caso de tener que prorrogar este contrato que tienen hasta mayo. Esto habría que hacerlo durante un período determinado para que entren a formar plantilla con carácter temporal, ya sea durante la crisis o el tiempo que consideren las autoridades. Yo espero que la palabra prorrogar contemple esa posibilidad.

No nos olvidemos que de momento los tenemos trabajando, hasta el 15 mayo tienen una relación laboral MIR que en España está perfectamente regulada. Lo único que espero es que si tuviéramos necesidad que seguir disponiendo de este grupo de profesionales para poder abordar esta crisis, porque tienen unas competencias en las especialidades más necesarias, se haga en las mejores condiciones laborales. Por ello, la medida que afecta a los MIR no creo que deba afectar en su formación para nada, al revés, esto es un plus de formación.

Fuente: OMC. Serafín Romero en una foto de archivo.

“Espero que la palabra prorrogar se convierta en la posibilidad de hacerles un contrato como personal, aunque sea con carácter temporal, y no sea prorrogar una situación de residencia”

Otra cosa es lo que tendrán que ir haciendo, de forma armonizada, todas las CC.AA, es que cualquier cosa que pueda afectarles a la hora de valoración en tiempo de trabajo, reconocimiento, etc. no implique ninguna merma. Lo que yo espero que vaya a hacer con este gran grupo es que se le haga el reconocimiento que merecen en caso de que tengan que seguir trabajando una vez acabado su contrato de relación MIR. 

P. ¿Qué valoración hace del papel de la sanidad militar y privada en la crisis del coronavirus?

R. Siempre hemos valorado que los recursos sanitarios se tienen que articular desde un entorno público, hemos defendido nuestro modelo sanitario. Está claro que en estos años de crisis el entorno de la sanidad privada ha crecido en cantidad y en calidad y hoy en día tenemos centros hospitalarios privados que pueden y deben ahora mismo dar ese paso necesario para que todos rememos en el mismo sentido.

Por su parte, la sanidad militar tiene una capacitación importantísima, especialmente en situaciones complejas y difíciles. La labor humanitaria de nuestra sanidad militar es encomiable y la propia OMC en su última convención le entregó la medalla de oro de la colegiación. Estamos plenamente convencidos que tiene una altísima capacidad logística y unos profesionales muy competentes.

En base a una buena coordinación, todo va a ayudar para que en España podamos intentar resolver esto de la mejor forma posible.

P. Otra de las medidas adoptadas tiene que ver con la contratación de médicos extracomunitarios. En una situación de emergencia como la que estamos, ¿está justificada?

R. No nos olvidemos de las normas con relación a casos de urgencia. Si no encontremos especialistas y hay especialistas cuyo título se encuentra todavía en proceso de homologación, los cuales hayan pasado la primera fase para garantizar una serie de cosas, sí se pueden hacer contrataciones. Esto es lo que viene ocurriendo en España en los últimos años, donde nos hemos quejado a veces de que se están contratando, con contrato no de especialista pero si con conocimiento, a personas que todavía no han visto su título homologados. Manteniendo un mínimo de garantías y en casos muy específicos de especialidades muy específicas, son medidas que se han venido tomando en todas las CC.AA a lo largo de estos años.

Por lo tanto, no sería un problema su contratación de forma temporal en base a las necesidades motivadas por una crisis como esta. En una pandemia como esta cualquier medida que aporte va a tener validez, independiente de que al estar en un estado de alarma todas las normas quedan derogadas y son las normas que va poniendo el Gobierno en función de la propia alarma. Si reúnen unos mínimos, son aquellos cuyo títulos están siendo revisados por el Ministerio y están en una fase adecuada, de forma escalonada se podrán y deberán incorporar si las medidas así lo permiten.

Fuente: OMC. Serafín Romero en una foto de archivo.

“No sería un problema la contratación de médicos extracomunitarios de forma temporal por las necesidades motivadas por una crisis sanitaria”

No podemos escatimar ningún aspecto normativo y hemos sido los primero en quejarnos y pedir que todos los que trabajen tengan su título homologado.

Sin embargo, cuando estamos en este tipo de situaciones lo que sí hay que pedir es seriedad a la hora de escalonar y que no todo el mundo pueda entrar sin el más mínimo control. Yo creo que esto es algo que ya funciona en el Ministerio de Sanidad.

P. Las medidas también podrían afectar a los médicos jubilados, ¿no se pondría en riesgo su salud como población de riesgo?

Efectivamente, no nos olvidemos que la población de riesgo son los mayores. Nosotros tenemos a un personal especialmente de riesgo, y las medidas, independientemente de las competencias, capacidades o conocimientos que pueda tener una persona por el hecho de ser médico, no les quita de ser población de riesgo. Hay entornos asistenciales donde podrían estar haciendo desde su propio domicilio estos triajes informativos de comunicación y derivación en el caso que fuera a lugar. Con lo cual sería una primera línea donde, sin necesidad de someterse a riesgo, pudieran estar echando una mano.

Después hay algunos compañeros que llevan poco tiempo de jubilación. Estamos hablando de un período no mayor a cinco años, en el caso de que sus condiciones físicas les permitan, que tienen una alta competencia y conocimiento en algunas especialidades en las que que vamos a tener problemas. Estoy poniendo el caso de, por ejemplo, intensivos. Compañeros que llevan toda una vida desarrollando estos servicios con alta capacitación en el uso de respiradores, en el uso de enfermos especialmente graves.

Yo creo que vamos a tener que canalizar esa demanda voluntarista de todos aquellos profesionales médicos que ahora mismo no están trabajando. Tenemos que ser lo suficientemente cautos e inteligentes para ir poniendo en un cierto orden aquellos que tienen que incorporarse y en qué tareas tienen que incorporar. Si no dejamos pasar esta oportunidad de canalizar, la sanidad española en la crisis del coronavirus se va a ver reforzada por este caudal de voluntarismo.

Los colegios catalanes han hecho ya un llamamiento y tienen un listado importante de compañeros para poder ofrecerse. El mismo ejemplo sigue el colegio de Ourense. En poco tiempo tienen casi 23 compañeros dispuestos a, con una pequeño curso, meterse en esa labor de triaje que antes comentaba. Esto demuestra que estamos ante una profesión dispuesta a dar todo lo que tiene y lo que hay hacer es canalizar toda esta demanda. De esta manera, podríamos no tener que recurrir a nuestros médicos jubilados ni a nuestros estudiantes, señal de que habremos abordado el virus en su tiempo.